Sobre la última riada

15/03/2018

Una vez mas debemos levantar la voz para denunciar ante nuestro pasivo Ayuntamiento la situación de «zona catastrófica» de Montencinar (ver Testimonio gráfico al final de esta publicación) agravada -agravadísima- por las continuas lluvias de estos últimos días.

Hemos podido ver una carretera -calle Alcudia- convertida en un lago, lago relleno de las tierras arrastradas por el agua de las calles en pendiente que a ella confluyen; hemos podido ver calles como, a título de ejemplo, la de Virgen de Lluch con profundos barrancos excavados por el agua cuya única salida es atravesando la o las parcelas de algunos vecinos que quedan anegadas y arrasadas; hemos podido ver «barricadas» al mas puro estilo guerrilla urbana levantadas por los vecinos para evitar que el agua se embalse en las zonas bajas de su calle y se les meta en sus parcelas; hemos podido ver, en fin, enormes balsas de agua, profundísimos surcos y baches en nuestras ¿calles?; hemos podido ver …

Pero NO hemos podido ver un Ayuntamiento preocupado por esta situación, que ha sido incapaz de resolver nuestras alegaciones al Proyecto de Reparcelación presentadas hace ya 23 meses (¡casi dos años!); NO hemos podido ver una sesión plenaria de nuestro Ayuntamiento donde se discuta mayormente como resolver los problemas de los vecinos y proponer soluciones factibles para hacerlo, sino mas bien de como engrandecer a los partidos gobernantes y de -como no- a ver quien tira los trastos a la cabeza del contrario con mas contundencia (hay auténticos expertos y si no asistan Vds. a un Pleno o vean los vídeos).

Mientras carezcamos de un gobierno municipal valiente, resolutivo, capaz de enfrentarse a problemas graves como es el de la urbanización de nuestra colonia y ofrecer soluciones realistas contando con el respaldo de los -al parecer- todopoderosos Técnicos e Interventor, que suelen ser la excusa para el «no se puede hacer eso»; mientras que tampoco se cuente para nada con la colaboración de nuestra Asociación y de los vecinos de Montencinar en general, a pesar de nuestra muchas veces manifestada voluntad de colaboración constructiva; mientras tanto, seguiremos así … de mal.

La JUNTA DIRECTIVA

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